Metió el gol, se defendió, sufrió y triunfó. Ese sería el resumen del partido para esta Base que, con poco, volvió a ganar un partido clave en la pelea por la permanencia. Esta vez el rival fue Libero y el autor del gol que alejó al Xeneize de la Promoción lo hizo Mariano Boz.
La Base no tuvo ideas, no tuvo fútbol, pero tuvo corazón, ganas y una entrega que hace tiempo estos mismos jugadores no mostraban. Con eso le alcanzó para ganarle a un descolorido Libero, que empujó, y en el segundo tiempo mereció empatar, pero estuvo lejos de ser una maravilla u algo por el estilo.
Mientras que en La Base el fútbol y el peligro debía comenzar en los pies de Mariano Scali, en Libero esa tarea la tenían los volantes abiertos (Stipech y José Gervasoni).
Y en ese juego participaron más del partido los volantes de Libero y así el equipo croata generó un poco más de peligro en el arco defendido por German Torres.
Fornillo estuvo cerca de convertir en el inicio del partido, pero no llegó a empujar un centro de Matías Bernia. Y en los minutos finales el ex Colón perdió por dos veces en el mano a mano con German Torres, quien de a poco se convirtió en el mejor de la cancha.
Mariano Boz entró poco en contacto con la pelota y Pérez insinuó peligro en los centros cruzados al área, la única arma de gol de La Base, muy poco.
Pero cuando el primer tiempo se moría un pase entre línea de Santiago Perez, dejó solo a Biaggioni quien saco un fierrazo cruzado, Tabernig dio un tibio rebote, provocó que Boz ingresara solo, sin marca, para establecer de zurda y sin ángulo el 1-0 para sorpresa de toda la cancha.
Libero, que no mereció irse al descanso perdiendo, salió a buscar el segundo tiempo derrotado, sin fuerzas, sin pelear, algo que se dio cuenta su técnico y empezó a ser cambios sin sentidos.
Con el correr de los minutos Libero comenzó a desesperarse y cuando se generaba una chance para empatar aparecía German Torres para ahogarle el grito.
La ventaja cambió el complemento, porque La Base se asentó, ajustó las marcas y comenzó a manejar con soltura los tiempos del partido. Libero sintió el impacto y perdió confianza. Su búsqueda se hizo infructuosa porque no encontró la manera de sorprender a un adversario bien estructurado, muy cómodo en su papel de equipo contragolpeador, capacitado para cerrar espacios y buscar a una pareja de ataque que, en la medida que Biaggioni ajuste un poco la definición, puede generar mucho peligro.
El gigante re contra dormido intentó igualar el encuentro por todos lados. Desbordes por las bandas, remates de media distancia, córners y tiros libres fueron las respuestas que intentó darle al problema de superar la defensa de La Base. Sin embargo, eso no le dio frutos debido a la buena labor de Torres y, además, a la poca eficacia de sus jugadores a la hora de definir.
El final del partido terminó con el rival tirando centros desde donde podía y el local refugiado en su campo. La más clara para Libero se dio a los 35, cuando la pelota paso al lado del palo izquierdo.
Libero estuvo cerca del empate, pero no lo consiguió por varios motivos: el primero fue la resistencia de La Base; el segundo, las pocas ideas en ataque; y el tercero, la mala suerte, porque la volea de Alfonso que paso por al lado del palo tranquilamente podría haberse metido. Recién con las llegadas de Biaggioni y Boz las cosas mejoraron un poco, pero Libero no pudo y cada vez está más complicado, en la lucha por la permanencia y sin síntomas de recuperación.
En los últimos segundos tuvieron como salvador a Torres, para salvar a La Base y desatar una locura en Avenida, con miles de hinchas abrazados a una ilusión, la de quedarse en primera división.
Mientras que en La Base el fútbol y el peligro debía comenzar en los pies de Mariano Scali, en Libero esa tarea la tenían los volantes abiertos (Stipech y José Gervasoni).
Y en ese juego participaron más del partido los volantes de Libero y así el equipo croata generó un poco más de peligro en el arco defendido por German Torres.
Fornillo estuvo cerca de convertir en el inicio del partido, pero no llegó a empujar un centro de Matías Bernia. Y en los minutos finales el ex Colón perdió por dos veces en el mano a mano con German Torres, quien de a poco se convirtió en el mejor de la cancha.
Mariano Boz entró poco en contacto con la pelota y Pérez insinuó peligro en los centros cruzados al área, la única arma de gol de La Base, muy poco.
Pero cuando el primer tiempo se moría un pase entre línea de Santiago Perez, dejó solo a Biaggioni quien saco un fierrazo cruzado, Tabernig dio un tibio rebote, provocó que Boz ingresara solo, sin marca, para establecer de zurda y sin ángulo el 1-0 para sorpresa de toda la cancha.
Libero, que no mereció irse al descanso perdiendo, salió a buscar el segundo tiempo derrotado, sin fuerzas, sin pelear, algo que se dio cuenta su técnico y empezó a ser cambios sin sentidos.
Con el correr de los minutos Libero comenzó a desesperarse y cuando se generaba una chance para empatar aparecía German Torres para ahogarle el grito.
La ventaja cambió el complemento, porque La Base se asentó, ajustó las marcas y comenzó a manejar con soltura los tiempos del partido. Libero sintió el impacto y perdió confianza. Su búsqueda se hizo infructuosa porque no encontró la manera de sorprender a un adversario bien estructurado, muy cómodo en su papel de equipo contragolpeador, capacitado para cerrar espacios y buscar a una pareja de ataque que, en la medida que Biaggioni ajuste un poco la definición, puede generar mucho peligro.
El gigante re contra dormido intentó igualar el encuentro por todos lados. Desbordes por las bandas, remates de media distancia, córners y tiros libres fueron las respuestas que intentó darle al problema de superar la defensa de La Base. Sin embargo, eso no le dio frutos debido a la buena labor de Torres y, además, a la poca eficacia de sus jugadores a la hora de definir.
El final del partido terminó con el rival tirando centros desde donde podía y el local refugiado en su campo. La más clara para Libero se dio a los 35, cuando la pelota paso al lado del palo izquierdo.
Libero estuvo cerca del empate, pero no lo consiguió por varios motivos: el primero fue la resistencia de La Base; el segundo, las pocas ideas en ataque; y el tercero, la mala suerte, porque la volea de Alfonso que paso por al lado del palo tranquilamente podría haberse metido. Recién con las llegadas de Biaggioni y Boz las cosas mejoraron un poco, pero Libero no pudo y cada vez está más complicado, en la lucha por la permanencia y sin síntomas de recuperación.
En los últimos segundos tuvieron como salvador a Torres, para salvar a La Base y desatar una locura en Avenida, con miles de hinchas abrazados a una ilusión, la de quedarse en primera división.
