La diferencia que existió fue abismal. Que por esas cosas del fútbol no quedó patentizado en el resultado. Lo cierto es que La Base, que recobró confiabilidad y funcionamiento, le ganó incuestionablemente ayer por la tarde a Catedral por 3 a 2, y trepó en la tabla.
Mariano Boz, en el primer tiempo, Sebastian Bono y Santiago Mayoraz, en el complemento, marcaron los tantos auriazules.
La Base fue ampliamente superior a Catedral. El equipo de la dupla marcó claras diferencias en todos los aspectos del juego y bien pudo haber resuelto, de haber sido más fino en la definición, por un marcador más abultado.
En el primer tiempo La Base fue una máquina de jugar pero, además, una máquina de errar goles.
Tácticamente leyó muy bien el partido, y por izquierda encontró una vía libre de llegada con las trepadas de Mayoraz y Santiago Perez, que se entendieron a la perfección y fueron hombres claves en el desarrollo del juego.
Catedral nunca fortaleció esa zona y por eso en los primeros 35' anduvo de sofocón en sofocón. Y si no se fue al descanso perdiendo más ampliamente, fue pura y exclusivamente porque el xeneixe no estuvo fino en el momento de resolver.
Igual acertó una vez a través de un remate perfecto de Mariano Boz, sobre la media hora, cuando por una habilitación de Perez el delantero resolvió de forma exelente colocando la pelota junto al segundo palo.
Así como fue importantes las proyecciones de Mayoraz y Perez, no menos gravitante resultó el trabajo de Iglesias y Sarubbi, recuperando y haciendo jugar al equipo, todo lo cual produjo muchos cortocircuitos en el fondo de Catedral.
La visita solo avisó a los 34', cuando tras un córner que se ejecutó desde la derecha, por el primer palo apareció el delantero que remato desviado.
Después de esto fue un espectador de lujo de La Base que monopolizó todo y generó más de diez chances de gol, que Boz, esencialmente, Bono y Nepote no supieron usufructuar por diferentes circunstancias.
El complemento siguió mostrando las mismas diferencias del comienzo. La Base siguió siendo prolijo y dueño de la pelota. Sacó a relucir todo su repertorio para ampliar las diferencias futbolísticas con Catedral.
Resultaba raro, además, que ante semejante diferencia no estuviera más contundentemente reflejada en el tanteador. Pero La Base iba por los costados, sorprendía con los pelotazos, pero no conseguía resolver en el área de enfrente.
El árbitro del cotejo, de muy mala tarea, provocó que el xeneixe se retrasara por contantes faltas inexistentes, así fue como a los 10', Catedral se encontró con un corner regalado y empato el partido tras un tremendo cabezazo, ante una falla en la salida de Torres.
Lejos de entregarse el conjunto de la dupla fue a buscar el resultado, y encontró la diferencia parcial a los 14', cuando Sebastian Bono pico sutilmente el balón, ante la salida del experimentado arquero, inflando la red, el eterno goleador ponía a La Base nuevamente arriba en el marcador.
Parecía partido liquidado, sin embargo nuevamente Catedral iba a llegar al empate a través de su hombre de punta, el volante derecho puso un notable pase gol, para que el delantero la clave en el ángulo superior derecho.
Claro que quedaba un cierre con emociones. La Base merecía algo más, con mucho temple el xeneixe llego a el gol de la victoria en tiempo cumplido, Santiago Perez dejo en el camino a dos defensores y remato por encima del arquero, la pelota beso el travesaño y le quedo a Mayoraz quien solo tuvo que cabecear hacia el argo vacío.
La Base consiguió su segunda victoria consecutiva, los tres puntos fueron el premio a la perseverancia y no darse nunca por vencido ante la adversidad.
Se viene Zona Roja y el conjunto de la dupla deberá jugar con la entrega que tuvo el equipo hoy y mucho temple, para defender este lugar en la tabla. Ojalá se encuentre la maduración y el equilibrio que tanto le pedimos a este equipo.