Y el fútbol es así… a veces te da, otras te quita… el sábado pasado La Base jugó realmente mal y casi gana. Ayer a la tarde ante Burlesque, La Base mejoró, sin ser una maravilla, pero mejoró al fin, y sin embargo se quedó con las manos vacías. Una desatención promediando la segunda etapa fue aprovechada por Sebastian Lavecchia que embocó una de las poquitas que tuvo Burlesque… así es el fútbol.
El conjunto de la dupla arranco mejor. Por la punta izquierda se triangularon Julián Castillo, Sebastian Bono y Santiago Pérez, quien llegó a rematar, pero su disparo fue interceptado por un defensor que se arrojó al suelo. Si bien no llegó a ser una ocasión neta de gol, al menos de movida se veía una sana intención de ir en busca de los 3 puntos.
Si hay algo que hace rato necesita La Base es el juego asociado de mitad de cancha hacia adelante. Ayer no lo tuvo (otra vez), pero al menos apareció en escena aquel que es capaz de cambiar los hilos del partido. Julián Castillo la pidió, se mostró, la agarró, encaró, pateó, generó faltas, generó tiros libres… no fue una actuación descollante, pero si mejor a lo que venía mostrando.
La Base no tardó en demostrar su iniciativa ante un Burlesque cauteloso, que esperaba en su campo. Pero a pesar de la actitud, a los xeneizes les faltaba claridad en la zona de definición. Ya promediando la primera parte, la burla, apoyados en el trabajo de sus mediocampistas, lograron emparejar el trámite y la pelota comenzó a ir de una punta a la otra. Todo con muchas imprecisiones.
No pasaba nada en el partido y la fricción ganaba terreno. Ambos equipos parecían más preocupados por no dejar jugar que por imponer sus propias ideas. Así finalizo la primera mitad, Burlesque no llego casi al arco de Torres, sin embargo pudo haber estirado la diferencia con un remate de Daniel Ripke, que no paso a mayores.
Pero no hay caso… cuando las cosas no salen… no salen. Consentino enganchó un par de veces por el sector izquierdo, y ante las dudas de Mariano Scali, metió un centro con veneno, que terminó en los pies de Lavecchia, quien apareció por detrás de todos, calladito la boca. Burlesque se puso 1 a 0 y sonaba como a demasiado premio.
Torres paro la línea de 3 y a partir de allí, La Base se expuso abiertamente a lo que podía ser un empate o una derrota más abultada.
En consecuencia todo fue nerviosismo y juego vertical en pos de conseguir la igualdad. Igualdad que pudo llegar desde un soberbio tiro de Sebastian Bono, que terminó con una soberbia atajada de Aseguinolaza. Burlesque pudo liquidar de contra, pero Cardozo dijo basta y otra vez perdió La Base.
La cuestión es muy simple: a La Base principalmente le falta juego, generación de jugadas y gol. Se le suma que no da todas las garantías en el medio campo como para completar el listado de déficits que hay por la avenida. Sin embargo ayer por la tarde jugó un poco mejor que frente a Corner, pero no hay caso… se vuelve de Santa Fe con una derrota más sobre el lomo… suele pasar, se juega mal y se gana, se juega bien y se pierde… esto es fútbol.